Tener en cuenta la importancia de los límites en educación, saber ponerlos y mantenerlos es una de las grandes claves para poder cimentar todo el proceso de desarrollo del individuo. En este sentido, la Cábala, es una gran herramienta pues ayuda a observar, evaluar y estructurar la tarea de educar. En este artículo, hacemos un análisis de la sociedad, la educación y plantearemos algunas alternativas a los problemas de límites actuales.
Una amiga maestra, con bastantes años de experiencia en el sector y considerable vocación educadora, me contaba como sus alumos, cada vez tienen un peor comportamiento, más actitudes desafiantes, falta de respeto a sus profesores e incapacidad para trabajar en equipo. Lo curioso es que no me estaba hablando de difíciles adolescentes sino de niños de ocho y nueve años.
Podríamos elaborar una crítica de los sistemas educativos actuales, los modelos sociales (con un entorno cambiante al que es muy difiícil adaptarse) o echarle la culpa a las nuevas tecnologías; pero, lo que está claro, es que hay un grave problema de límites y, los jóvenes, son las principales víctimas de esta situación.
En Occidente, la educación, se basó en el sistema prusiano que preparaba a los niños para una sociedad industrial (agrupados por edades, con timbres para marcar tiempos, edificios divididos en secciones, caminar en fila, figura del profesor como autoridad incuestionable…). Sin embargo, en la época postindustrial, esto cambió y se reformó la educación (a medias) con un sistema en el que la enseñanza pasó a ser motivante, sin autoritarismo del profesor, se fomentó el pensamiento crítico, se implementó el trabajo en grupos cooperativos y se desarrollaron nuevos modelos de aprendizaje.
Por otro lado, los modelos familiares, también experimentaron enormes cambios. Aquellas estructuras tan rígidas del pasado, con el patriarca, el ama de casa y los hijos, dejaron lugar a nuevos modelos, en los que los progenitores o tutores son mucho más amigables y, los niños, tienen mucha más autonomía dentro del seno familiar.
«Pasamos de la dictadura de los padres a la dictadura de los hijos»
Jaime Barylco
Pero los problemas de comportamiento en aulas y otros ámbitos no mejoraron, de hecho empeoraron. En las sociedades modernas, cada vez hay más problemas disruptivos y falta de límites. Esto hace replantearnos la educación como modelo integral para la formación del individuo. Y no basta con dotarles de herramientas y modelos vanguardistas de aprendizaje, sino que hay que edificar y estructurar en todos los ámbitos.
De cara a plantear soluciones, la Cábala, ofrece una visión y mecanismos claros al alcance de la sociedad actual. Debemos tener en cuenta que el desarrollo integral de la persona empieza en las dimensiones más bajas del alma humana y es un proceso que dura toda la vida. En este proceso, familias y educadores, necesitan herramientas para poder estar involucrados en este proceso, que es su responsabilidad.
Como elemento inicial, en el seno familiar, hay que establecer una jerarquía clara y además, las estructuras de convivencia, deben quedar bien definidas (horarios, espacios, reglas de cordialidad, etc). Aparte de esto, los niños, deben sentirse valorados, amados y atendidos. Desafortunamdamente, en este último caso, vemos como los niños pasan mucho tiempo solos o con cuidadores, lo que hace que tengan una propensión a llamar la atención o al mal comportamiento.
Por otro lado hay que atender a la formación de todas las dimensiones del individuo, respetando su autonomía y teniendo en cuenta su estado madurativo. La formación y el crecimiento es un proceso que abarca toda la vida y que se cimenta en la infancia.
La Cábala ofrece muchas herramientas para el crecimiento personal y espiritual del individuo y, El Árbol De La Vida, ayuda en todo el proceso pues, como mapa de la realidad, permite ver en qué dimensión hay un desequilibrio y, así, poder armonizar. Veamos un resumen de las Sefirot y su posible aplicación en educación, aunque en otros artículos haremos un desarrollo más extenso:
| Maljut | Nos ayuda a que el individuo entienda la importancia de la actividad física y la buena alimentación para mejorar la salud. Nos ayuda a entender que nuestro entorno, nuestro cuerpo, nuestras capacidades tienen límites | |
| Yesod | Sirve para entender la importancia de la relación con los semejantes. Que sepamos aprender de los demás y respetarlos nos ayuda a mejorar en el ámbito social. En este sentido equilibrar esta dimensión hará que aumente la autoestima del individuo y su relación con los demás. | |
| Netzaj | Comprende entender y mejorar en la perseverancia. También está relacionado con el lenguaje emocional. | |
| Hod | Como lenguaje estructurado, sirve que aprenda a comunicarse de manera correcta y cordial con los demás. La relación con los demás a través de la palabra mejora o empeora las relaciones. | |
| Tiferet | Engloba el autoconocimiento y mejora de la autoestima. | |
| Guevurá | – | Supone el respeto de los límites entendiendo que la sociedad y el entorno tienen normas. |
| Jésed | Es la importancia de la generosidad como elemento fundamental de la convivencia. En este ámbito es fundamental saber limitar la generosidad hacia los demás y hacia uno mismo. | |
| Biná | Representa el pensamiento lógico y racional. | |
| Jojmá | La parte intuitiva y de sabiduría que el individuo tiene. | |
| Kéter | La dimensión trascendente del ser humano. |
Además de utilizar cada dimensión como herramienta de mejora y ayuda en el proceso de observación, evaluación y mejora de la persona, usaremos Daat como elemento de conexión estructural de todas las dimensiones ya que el sujeto funciona como un sistema.
En otros artículos iremos desgranando dimensión por dimensión la aplicación del Árbol en el proceso de enseñanza, fomento de la autonomía del individuo, crecimiento personal y modelos de convivencia.