9 días del Omer, segunda semana, segundo día Guevurá de Guevurá

La fuerza de la disciplina

Baruj Atá A-do-nai, E-lo-he-nu Melej HaOlam asher kideshanu bemitzvotav vetzivanu al Sefirat HaOmer.
Haiom tishá iamim shehem shavúa ejad ushené iamim laomer.

En su aspecto místico, Guevurá nos acerca al concepto de Tzimtzum, la contracción y limitación de las emanaciones Divinas que permiten el flujo de la Creación, al restringir las energías infinitas del Ein Sof. En el Árbol de la Vida, Guevurá es la energía que restringe a todas las demás para que no se expandan infinitamente. Se podría interpretar como algo negativo, ya que restringe el flujo de la energía Divina proveniente del Ein Sof, pero su existencia es fundamental ya que sin ella no sería posible la existencia. 

Entendiendo los aspectos negativos de la Creación como la negación de Di-s, Guevurá de Guevurá es la expresión de la negación de la negación de Dios. Esos aspectos negativos que contradicen la presencia Divina son la injusticia, la opresión y la violencia; y, en el ámbito personal, las emociones negativas (la ira, el miedo, la tristeza, el odio, la envidia…) creando distorsiones en nuestra realidad. 

Por tanto Guevurá de Guevurá supone corregir estas distorsiones, protegiendo a los vulnerables, restaurando la justicia y liberando a las personas de sus ataduras emocionales negativas. Además, este aspecto divino nos ayuda a superar el miedo al negar la negatividad, lo cual es una afirmación de la presencia y la acción divina en nuestras vidas.

Este trabajo ayuda a llegar a una sensación de totalidad y plenitud en la conexión con lo divino; el mejor antídoto contra el miedo, uno de los mayores obstáculos en nuestro camino espiritual y vivir en el asombro y amor hacia lo divino.

En este período de crecimiento personal y espiritual, realizamos una introspección profunda para explorar nuestra disciplina, autocontención y determinación en nuestro desarrollo, con nuestra familia, con nuestro entorno social y, en general, en todos los aspectos de la vida. Es un momento oportuno para examinar las limitaciones que nos imponemos y considerar cómo podemos aprovechar la fuerza interior que reside en nosotros para superar obstáculos.

Guevurá de Guevurá nos recuerda la importancia de establecer límites saludables y de mantenernos firmes en nuestras convicciones. Sin embargo, esta energía, en ocasiones, se vuelve demasiado restrictiva y nos hace intolerantes, rígidos e incluso opresores, dejando de tener en cuenta a los demás.

En el ámbito personal nos puede llevar a ser intransigentes, tendiendo a la autocrítica excesiva y un diálogo interno cruel, conduciendo a la culpa, la vergüenza o la sensación de inutilidad. Esto puede derivar en la autodestrucción, el caos, la falta de dirección y la eliminación de la Luz que hay en nuestro interior.

Por lo tanto, nuestro trabajo es cultivar una disciplina equilibrada que nos permita crecer y evolucionar como individuos, a la vez que mantenemos una conexión profunda con los demás y con lo divino. Para ello, es fundamental:

  • Identificar las limitaciones autoimpuestas que nos impiden alcanzar nuestro máximo potencial.
  • Elaborar estrategias para desarrollar la fuerza interior y superar obstáculos.
  • Establecer límites saludables sin caer en la rigidez o la falta de empatía.
  • Y tener una disciplina equilibrada que nos permita crecer como individuos y mantener una conexión con los demás.

Reflexionemos y meditemos sobre las siguientes cuestiones:

  • ¿Es mi disciplina razonablemente restringida o es excesiva?
  • ¿Tengo la suficiente disciplina en mi vida y en mis interacciones?
  • ¿Estoy organizado?
  • ¿Utilizo eficientemente mi tiempo?
  • ¿Qué origina mis problemas con la disciplina y qué puedo hacer para mejorarla?
  • ¿Dedico tiempo cada día para hacer un balance personal de mi organización y mis logros?

Nuestro ejercicio para el día supone hacer un plan detallado para organizar el día y, al final del día, verificar lo que se ha conseguido.

No olvidemos que Guevurá es un aliado poderoso que nos brinda la oportunidad de poner orden y equilibrio en nuestras vidas y en nuestras relaciones. No existe un modo de prosperar sin firmeza y disciplina. Guevurá de Guevurá nos recuerda la importancia de mantenernos firmes en nuestra conexión con lo divino mientras buscamos superar nuestros miedos y limitaciones.

Shalom a todos.

Fuentes:
Meditaciones de la cuenta del Omer, E. Madirolas
Counting Omer, The Rabbinical Assembly
El conteo del Omer, Daniel Ben Eliyahu
Bendiciones del Omer, Mesilot Ha Torah, Centro para el esclarecimiento judío