6 días del Omer, primera semana, sexto día, Yesod de Jesed

La unión en el amor

Baruj Atá A-do-nai, E-lo-he-nu Melej HaOlam asher kideshanu bemitzvotav vetzivanu al Sefirat HaOmer.
ששה ימים לצומר
Shishá yamim laOmer
(Bendito eres, Oh Señor, Di-s nuestro, Rey del Universo, que nos has santificado con tus preceptos y nos ordenaste contar el Ómer.
Hoy son seis días del Ómer.)
Mantra de meditación
אהבה היא היסוד שלי
Ahavá hi haYesod Shelí
El amor es mi fundamento

El día 6 del conteo del Omer, marcado por la energía de Yesod de Jesed, nos invita a reflexionar sobre los cimientos del amor bondadoso y la misericordia en nuestro camino de crecimiento y refinamiento espiritual. Simbólicamente, este tránsito representa el paso de la esclavitud en Egipto a la liberación en el Monte Sinaí, figurando como un viaje de transformación interna.

Yesod, la novena sefira del Árbol de la Vida, actúa como un puente entre lo espiritual y lo material. Al igual que un embudo, recibe las energías superiores de las sefirot por encima de ella y las canaliza hacia Maljut, la sefira de la manifestación física. En este sentido, Yesod facilita la creación y la manifestación de nuestros deseos en el mundo material.

En Yesod de Jesed, meditamos sobre la naturaleza profunda del amor y la compasión. Estos no son sólo sentimientos pasajeros, sino que representan una acción comprometida. Requiere que establezcamos vínculos sólidos y trabajemos en conjunto, desarrollando la capacidad de unirnos en un esfuerzo común. Es el lazo invisible pero poderoso que une corazones y mentes en una colaboración armoniosa.

La unión en la bondad amorosa implica más que simplemente estar juntos; se trata de crear algo significativo en conjunto. Es un compromiso compartido de construir y crecer, de apoyarse mutuamente en el camino hacia el crecimiento personal y la realización conjunta.

Este día nos invita a reflexionar sobre la importancia de la colaboración y la cooperación en nuestras relaciones. Es una oportunidad para fortalecer los lazos emocionales mediante la participación activa en proyectos y actividades compartidas. Al trabajar juntos hacia metas comunes, no solo fortalecemos nuestra conexión, sino que también cosechamos los frutos de una relación enriquecida. En este tránsito por Yesod de Jesed, recordemos que el amor bondadoso y la misericordia son pilares fundamentales en nuestro camino de crecimiento espiritual, fortalecemos nuestras relaciones y cosechamos los frutos de una vida plena.

El ejercicio para el día de hoy consiste en iniciar la construcción de algo tangible junto a un ser querido. Puede ser un proyecto doméstico, una actividad creativa o cualquier otra empresa que permita colaborar y compartir experiencias sustanciales e importantes.