Humildad en el amor
Baruj Atá A-do-nai, E-lo-he-nu Melej HaOlam asher kideshanu bemitzvotav vetzivanu al Sefirat HaOmer.
Haiom jamishá iamim laomer.
(Bendito eres Señor, Di-s nuestro, Rey del Universo, que nos has santificado con tus preceptos y nos ordenaste contar el Ómer.
Hoy es el quinto día del Ómer)
Mantra de meditación
אמת ואהבה את חותמות האל
Emet VeAhavá et jotmot haEl
Verdad y amor los sellos de Di-s
Hod como elemento de equilibrio de la energía expansiva de Netzaj, restringe ese posible avasallamiento con los valores de ceder y perdonar. Esto supone hacer el esfuerzo de comprender y aceptar al otro. En el amor tenemos que ser humildes y valorar que recibimos más de lo que damos, y que la esencia de este proviene de una fuente Divina. Debemos aceptar con gratitud las bendiciones que trae.
Cuando amamos, a veces nos encontramos con obstáculos que nos impiden perdonar a quienes amamos o nos dificultan ceder. Es el ego haciendo su trabajo. Ser humildes supone ser capaces de restringir la energía expansiva que hay en nuestro interior y que nos domina. Nos permite elevarnos por encima de nuestras propias convicciones y considerar el bienestar de nuestras relaciones por encima del deseo de tener la razón. Ceder y perdonar tiene como objetivo la armonía y la reconciliación, por lo que requiere de nosotros una actitud comprensiva, incluso en momentos de conflicto.
La humildad nos permite reconocer que todos somos humanos y que todos cometemos errores. Nos ayuda a liberarnos del peso del orgullo y la terquedad, abriendo espacio para la comprensión y el perdón mutuo. Un amor verdadero no se aferra a la necesidad de estar en lo correcto, sino que busca la armonía y la conexión emocional por encima de todo.
El ejercicio para hoy nos invita a trascender nuestro ego y buscar la reconciliación con aquellos a quienes amamos, incluso si creemos que tenemos razón. Deja a un lado el orgullo y busca la oportunidad de reconciliarte con aquel con quien tuviste desacuerdo. Evalúa cómo te sientes, medita sobre esa oscuridad que hay en tu interior y nota cómo se ilumina con este ejercicio