40 días de Omer. Sexta semana, quinto día, Hod de Yesod

La humildad en la unión

Baruj Atá A-do-nai, E-lo-he-nu Melej HaOlam asher kideshanu bemitzvotav vetzivanu al Sefirat HaOmer.
(Bendito eres, Oh Señor, Di-s nuestro, Rey del Universo, que nos has santificado con tus preceptos y nos ordenaste contar el Ómer).
Haiom arbaím iom shehem jamishá shavuot vajamishá iamim laomer.
Hoy es cuarenta días, que son cinco semanas y cinco días del Ómer.

En el día de hoy, exploramos la hermosa cualidad de la humildad y la claridad mental en nuestras relaciones. Trabajamos aspectos de nuestra personalidad como la honradez y la integridad. Trabajamos en esos límites que ponemos a nuestra naturaleza expansiva, pero en el ámbito de la sanación interior, no como autobloqueantes que perjudiquen nuestro propósito en este plano existencial.

En nuestro proceso de crecimiento y, gracias a esta dimensión energética, apartamos aspectos negativos de la psique provocados por nuestro ámbito externo. Estos aspectos, como la arrogancia, nos debilitan, aunque pensemos lo contrario. Este defecto de la personalidad hará que se frene nuestro aprendizaje, que se menosprecie a los demás, provocará un aislamiento social y, sin duda, conflictos interpersonales. En otro orden de cosas, el enfoque en los propios deseos, satisfacciones y necesidades, sin tener en cuenta a los demás, nos hará imposible apreciar y vincularnos de un modo sano; hará que no entendamos el propósito superior de toda la creación.

Hod de Yesod aporta claridad mental, es el esplendor, supone la lucidez en el sentido de liberar las ataduras mentales, desarticula los condicionamientos y programaciones tóxicas que se producen a nivel emocional y que han ocasionado traumas, baja autoestima, inseguridades y resentimientos; tengamos en cuenta que gran parte del sufrimiento de la persona se produce por esta programación y Hod ayuda a desprogramarlo. También nos libera de la esclavitud de la palabra, tanto las que dice como las que le afectan. Además, ayuda a la interpretación del despertar de la conciencia, pues participa en la estructuración cognitiva

En el ámbito de las relaciones ayuda a equilibrar la interacción con los demás. Supone la humildad para entender las necesidades comunicativas de los demás permitiendo ser asertivo, adaptar nuestras conversaciones en función de las personas, nos hace ser flexibles sin mantener estructuras rígidas y, en definitiva, ofrecer un ámbito comunicativo efectivo.

Planteamientos:

¿Me esfuerzo por comunicarme de manera que respete los sentimientos y opiniones de los demás?
¿Estoy abierto a recibir retroalimentación y crítica de manera humilde, o tiendo a defenderme y justificar mis acciones?
¿Estoy perceptivo a aprender de las situaciones y de lo que aportan los demás, en lugar de mostrarme arrogante y superior?

Ejercicio del día
Permite que los demás expresen sus opiniones libremente y haz un trabajo de interesarte por lo que están contando, no les interrumpas. Haz un uso de las palabras de modo que promuevan la armonía en la comunicación.